Luego del parto o la cesárea tienes poco espacio en la cabeza para las cosas triviales de la vida. Y acordarte cada día de ponerte la faja luego de bañarte en las mañanas debe estar dentro de tus prioridades (ojo que el baño diario es, por sí mismo, un objetivo importante a alcanzar en la etapa post parto) Pero volviendo a la reducción del abdomen, parece un tema frívolo, pero volver a tu forma luego de haberte inflado y subido 12 kilos, como fue mi caso, no es juego.
De hecho tiene mucho que ver qué clase de alimentación has tenido durante las 40 semanas de embarazo, e influye la cantidad de calorías que comerás mientras estás en la etapa post parto. Y claro que tiene que ver la lactancia. Yo comía todo lo que estaba a mi alcance y bajé 12 kilos en 3 semanas, mientras me dedicaba a mi nuevo trabajo: dar de lactar.
Pero creo que la maravillosa faja ayudó a devolver todo a su sitio. Lo sientes, lo crees, lo ves.
Te la recontra recomiendo futura madre.